Y tú que vienes y vas como una marea
Caminando y marcando tus huellas en mi historia
Tú que hablas sin decir nada
Con esa inquisitiva mirada que me pregunta que quiero
Y yo que sólo quiero encontrarte
Absorber tus penas
Crear juntos una luz propia que ilumine nuestro tiempo
Un extranjero que habla mi lengua
Una lengua que come la mía, que juega, dejando sendas de deseo en mi cuerpo,
Apagando y encendiendo llamas
Más no quiero retenerte, ni atarte, sino que andes sin cadenas
No quiero que cumplas mis sueños, sino que crees nuevos con los que dormirme
No que ocupes mis espacios vacíos, sino que llenemos espacios inéditos
Quiero tu respeto, tu compañía, tu humor
Cuando quieras dármelo
Cuando toco el cielo en tus brazos, estoy preparada para bajar y poner mis pies descalzos en el frío suelo
Cariño, amistad, sexo, diversión, gozo, penas, soledades
El pan nuestro de cada día
Puertas abiertas para salir, sin cerrojos
Soy rara, diferente, tenaz no audaz, tozuda, solitaria llena de gente, independiente
Más te necesito a veces
Te extraño otras
Quiero refugiarme bajo tus ramas,
Reptar por tu tronco
Abonar tus raíces
Quiero tus manos grandes sujetando mi cara justo antes de besarme, Con esa desmesurada ternura que dejan tus labios
Y perderme en esa mirada, justo un segundo antes de cerrar los ojos,
Y ver tu reflejo en mi alma
Quiero que fluyan tus saladas aguas acoplándose a las mías dulces,
Y desembocar en el mismo mar,
Nadando y ayudándonos a respirar cuando nos sumerjamos
O sólo dejándonos llevar cuando fluyan mansas
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.