Guardo un trocito de sol
Guardo tu boca intensa
Guardo el sabor de tu piel
Soy la mujer que te aguarda
Soy aquella que te guarda
Soy dama del Alba
Noche enamorada
En mi mundo las rocas arden
Las piedras piensan
Pesa el aire
El agua vuela
La vida no espera
Persevera ajena
No soy dueña de nada
Nada salpica mis ganas
Libre del espejo
Sueño sin cadenas
Y así te dejo ir
Tierna en amores
No me des la espalda
Que no veo tu mirada
Vete sin mirar atrás
Yo ya estoy preparada
La locura del corazón
Sólo es sal de mis lágrimas
Tremenda poesía. Duele el solo leerla.Una excelente composición que dice mucho, demasiado... Magnífica..
ResponderEliminarGracias Alberto. El dolor a veces puede ser dulce, si está en el camino del olvido. besitos
EliminarDeclarada enamorada se levanta de nuevo, coge fuerzas, y con el mundo en llamas, se prepara para soltar cadenas, y llorar sólo, o llorar tanto, y qué más da si al final era sólo deseo, o se fue, o no se fue, y no miró atrás, o sí. Lo mejor de todo es que a pesar de las paradojas, ella quedaría en pie.
ResponderEliminarSiempre queda en pie está fémina como bien dices profe. Quizás es lo más importante, continuar avanzando a buscar nuevos horizontes. Besos mi niño
EliminarConcéntrate en ese trocito de sol que guardas..
ResponderEliminarNo entiendo mucho de poemas , pero en este que nos dejas si encuentro
significado..
Por eso, mira a ese poquito de sol que te dará la vitamina que te dé un mayor bienestar..
Gracias mi querido amigo. Yo creo que la poesía no es para sentir y transmitir, a veces ni siquiera lo que escribió el poeta, esa es la magia de la palabra y lo que más me gusta, como se ajustan a uno. En este caso, la entendiste muy bien y te agradezco pues entre todos esos rayos de sol, estás tú. Muchos besos y buen fin de semana
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